El cierre temporal de muchas empresas durante el verano es una práctica habitual en España. Agosto, en particular, es un mes en el que cientos de negocios bajan la persiana para tomarse un merecido descanso. Pero, mientras la actividad se detiene, las amenazas no lo hacen.
En Mood Seguridad, con años de experiencia protegiendo todo tipo de instalaciones empresariales, sabemos que los cierres vacacionales representan una oportunidad para los intrusos si no se toman las precauciones adecuadas. Por eso, hemos preparado una guía con consejos esenciales para evitar sorpresas desagradables a la vuelta.
Antes del cierre: prevención planificada
- Revisa todos los sistemas de seguridad existentes: cámaras, alarmas, control de accesos, sensores de movimiento… Comprueba que funcionan correctamente y que cuentan con batería de respaldo o conexión a SAIs (sistemas de alimentación ininterrumpida).
- Asegúrate de que la alarma está conectada a la CRA (Central Receptora de Alarmas) que ofrezca cobertura 24/7. Si ya lo está, revisa los protocolos de actuación en caso de incidente durante tu ausencia.
- Actualiza los contactos de emergencia asociados al sistema de seguridad: responsables de la empresa, vigilantes, servicios técnicos o mantenimiento.
- Desactiva accesos digitales no necesarios, como tarjetas o huellas dactilares de empleados que no necesiten acceder durante el periodo vacacional.
- Haz una copia de seguridad de toda la información digital y protégela mediante almacenamiento seguro (offline o en la nube).
- Desconecta aparatos eléctricos no esenciales y revisa que no haya dispositivos que puedan sobrecalentarse o provocar un incendio.
Seguridad física y perimetral
- Verifica cerraduras, rejas y sistemas físicos de protección. Asegúrate de que todas las puertas y ventanas estén bien cerradas y sin signos de desgaste.
- Refuerza accesos vulnerables, como almacenes, muelles de carga o salidas traseras, con cerramientos adicionales o detección anticipada.
- Instala iluminación disuasoria con detección de presencia en el exterior del edificio o en las zonas poco visibles.
- Oculta la señal de inactividad: si es posible, deja alguna persiana semiabierta o programa luces interiores para que se enciendan en horarios aleatorios. La apariencia de normalidad es un factor disuasorio.
Vigilancia y control remoto
- Asegúrate de tener acceso remoto a tus sistemas de videovigilancia, ya sea desde el móvil o un ordenador seguro. Revisa las grabaciones de forma periódica.
- Activa el envío de notificaciones en caso de alerta: si ocurre cualquier incidencia, recibirás un aviso inmediato en tus dispositivos.
- Consulta si tu proveedor de seguridad ofrece un servicio de patrullaje o supervisión ocasional para empresas cerradas por vacaciones. En algunos casos, es posible reforzar la vigilancia solo durante este periodo.
Coordinación con empleados y proveedores
- Informa a todo el equipo del protocolo de cierre: qué se debe hacer antes de salir, quién es el responsable de activar la alarma, qué medidas hay que revisar.
- Revisa si hay visitas o entregas programadas durante las vacaciones. Si las hay, reprograma o establece una persona de contacto para su gestión segura.
- Comunica el cierre a tus proveedores de forma oficial, indicando que no se recibirán envíos ni habrá personal en las instalaciones.
Prevención frente a sabotajes y riesgos internos
- Cambia contraseñas de acceso digital si hay personal rotativo o si has tenido alguna baja reciente.
- Revisa el estado de los detectores de humo, gas o agua, especialmente si hay zonas poco frecuentadas que podrían no alertar a tiempo de una fuga o incendio.
Reapertura sin incidencias
- Planifica una revisión general antes de volver a abrir: cámaras, grabaciones, sensores, accesos, sistemas eléctricos…
- Programa una puesta a punto técnica con tu proveedor de seguridad, para comprobar que todo ha funcionado correctamente durante la ausencia y que el sistema sigue en condiciones óptimas.
En Mood Seguridad, defendemos un enfoque preventivo y profesional. El cierre por vacaciones no tiene por qué ser un riesgo si se gestiona con criterio. De hecho, puede ser una excelente ocasión para actualizar el sistema de seguridad, incorporar nuevas soluciones o reforzar aquellas zonas que siempre se han considerado secundarias.Si estás planeando tu descanso de verano, recuerda que una empresa bien protegida también protege tu descanso. Hazlo bien ahora y ganarás tranquilidad para toda la temporada.